Para mí, la principal utilidad que tiene el desarrollo de la creatividad en la infancia, es ahorrar una cantidad enorme de esfuerzo y energía para desaprender en la edad adulta.
Pondré mi experiencia como ejemplo.
Soy una persona a la que le cuesta enfocar. Un oftalmólogo diría que soy miope y además bastante. La verdad es que no veo un pimiento más allá de un palmo de mis narices. A medida que las cosas se alejan, se van emborronando más y más...
Hace poco descubrí que esto no tenía por qué haber sido así. Pero a mis 7 años no pude ver otra cosa que las "evidencias" de mi alrededor. Mi familia, con toda su buena intención, me fue preparando para lo "inevitable". El oftalmólogo corroboró el diagnóstico finalmente, y no se conformó con eso, me dijo que iría a más. Nadie sabía que poniéndome las gafas, mis ojos se acomodarían inevitablemente a esto.
Ahora se que soy capaz de salvar esta situación.
Pero que pasa... Que tengo que desaprender una cantidad enorme de cosas. Desaprender para aprender que la genética apenas pesa, que los cambios no cuestan tanto esfuerzo, que los oftalmólogos no tienen por qué "ver", que puedo ver por mí misma y no conformarme con lo que me dice mi entorno, que puedo romper con años y años de un funcionamiento incorrecto, y mil etcéteras más.
Ojalá, cuando era pequeña, alguien me hubiera dicho que no necesitaba esas gafas, que podía confiar en mi.
Ahora estoy aprendiendo a vivir en la zona desconocida (la zona borrosa).
Estoy acostumbrando a mi cerebro a sentirse cómodo en la incertidumbre (a salir de la comodidad de las gafas). Esa es la zona de la creatividad.
A ver esa zona como una oportunidad.
¿No os parece maravilloso poder ayudar a un niño a salirse del redondel?
Hay que crear espacios de ilusión. Espacios donde sepan que pueden expresarse, ver por ellos mismos y poner a prueba las suposiciones.
Gracias Simonetta por introducirme en el mundo de la Neuroplasticidad y por verme tal como soy.
Gracias Javi por decirme que hablo con el corazón, a partir de ahora siempre.
Gracias Nacho por servirme de ejemplo.
Gracias Josue por tantas aclaraciones (ya sabes que veo borroso...).
Gracias mi niño por darme fuerza siempre, aunque no te des cuenta.
Gracias hermanita por estar orgullosa de mí. Yo también lo estoy de tí.
Gracias a todos mis compañeros de PNL por acompañarme.
